Antes de comenzar a contestar esta pregunta, lo primero que hay que decir es que "Satanás" significa adversario; oponente, enemigo. Por tanto, este ser es aquel que se opone a Dios y a todo lo que El es y quiere. Un oponente no es más que alguien que busca entorpecer, estorbar o impedir que algo se lleve a cabo. Así que, si nos quedamos con lo que el nombre significa, tenemos que concluir que Satanás es el enemigo de Dios y de su creación quien busca entorpecer, estorbar e impedir que se lleve a cabo la voluntad de Dios.
Pero Cristo habló sobre las características de este ser a quien también se le llama "diablo" y Beelzebú (que significa "jefe de los demonios"). Jesús dijo:
El diablo ha sido un asesino desde el principio. No se mantiene en la verdad, y nunca dice la verdad. Cuando dice mentiras, habla como lo que es; porque es mentiroso y es el padre de la mentira. Juan 8:44
De esto obtenemos que si hay algo que caracteriza a Satanás es su carácter violento. El busca matar al creyente y frsutrar el plan de Dios para él. Por matar tenemos que entender que la paga del pecado es muerte (Romanos 6:23), por tanto, Satanás - junto con las pasiones y debilidades de cada cual (Santiago 1:14) - es el encargado de facilitar la caída en pecado del creyente. Recordemos que la Palabra dice que la voluntad de Dios es nuestra santificación (1 Tesalonicenses 4:3), que los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad (1 Timoteo 2:4).
No hay nada que estorbe más la santificación que el pecado, y no hay nada que estorbe más la salvación que estar sujeto al imperio de la muerte, esto es, estar bajo el dominio de Satanás (Hebreos 2:14). La Buena Noticia es que tal como dice Hebreos 2:14, Cristo se hizo carne y sangre para destruir por medio de su muerte al que tenía el imperio de la muerte; en Cristo somos libres del yugo satánico que nos lleva al pecado y a la muerte eterna.
Resumiendo, Satanás es el enemigo de Dios y de la humanidad. Su propósito principal es oponerse a que la voluntad de Dios se cumpla en la vida de los hombres. La voluntad de Dios es que andemos en santidad, que vengamos al conocimiento de la verdad y que seamos salvos, que tengamos vida eterna. El trabajo de Satanás es impedir que esto ocurra, su propósito es impedir que las personas conozcan la verdad (para eso levanta su arma de la mentira), impedir que vivamos vidas santas y por tanto, esclavizarnos al pecado (por eso en la Biblia se le llama el tentador) para tenernos bajo su dominio de muerte impidiendo de esta manera que seamos salvos y tengamos vida eterna.
Por otro lado, algo que debemos siempre de tener en mente respecto al enemigo es que este tiene poder limitado, es decir, él llega hasta donde Dios y solo Dios lo permite (ver Job 1 y 2). Contrario a Dios, nuestro Adversario no es omnipotente, él no lo puede todo; él no es omnisciente, no lo sabe todo y no es omnipresente - no puede estar en todas partes. Y muy importante, Cristo lo venció en la cruz del Calvario y también despojó a los principados y potestades (demonios) y los humilló públicamente triunfando sobre ellos en la Cruz (Colosenses 2:15).
Cristo, por el sacrificio de la cruz, tiene poder y autoridad "sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo, sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies..." (Efesios 1:21-22). Esto incluye a nuestro adversario el diablo.
Continuará...
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